-una excusa cualquiera (un dolor, un problema, el vecino de arriba, una caca de perro en la calle…)
-1/2 kilo de frases para decirse internamente del tipo: “no puedo más” “yo no merezco esto” “¿pero que se habrá creído?, etc.
-1/2 kilo de frases del tipo: “esto no hay quien lo aguante”, “es que todo me pasa a mí”, “¿será posible?”, etc.
-Alguien o algo que sirva de chivo expiatorio para compartir generosamente nuestro rico guiso de enfado (ideal perro propio, hijo o subordinado, aunque la pareja no está mal tampoco)
Lo primero en cualquier receta siempre es pelar las patatas, pero como en este guiso no hay patatas, podemos obviar este paso.
Lo siguiente es elegir la excusa que vamos a utilizar para indignarnos y llegar laboriosamente al estado de cabreo. Para aprendices, se aconseja una razón que sea fácil de llevar al enfado, como la política, un dolor o enfermedad o “el puto niño jodiendo como siempre”.
Para cocineros más avanzados, cualquier excusa es válida; como “esa puta mosca”, “la pesada de la vecina otra vez tendiendo (cuanto lava la jodia?)”, “esa maldita nube tapándome el sol”, “el día de perros que hace”, o “el ruido que hace esa gorda de enfrente al sorber la sopa (así se atragante, ¡coño ya!)”.
Una vez elegida la excusa, se pone a hervir en la propia mente y se adereza con todo tipo de frases internas como: “¿pero por qué todo me pasa a mí?” “es que hay que gritarles porque es el único idioma que entienden” o “no puedo más, no puedo con esto, es superior a mí”. Es importante no quedarse corto con el victimismo, fundamental para el sabor. Frases como: “es que todo va en mi contra” o “pobre de mí, pobre de mí” vienen estupendas para ello.
Se deja rumiando a fuego lento, cocinándose todo bien. Se puede hacer algo mientras, como fregar los platos, hacer la compra o alguna otra tarea que haga sin mucha atención para poder dejar que el guiso se vaya haciendo. Si es algo que resulta desagradable, el guiso cogerá más solera.
En una hora o incluso menos “voila”, un rico enfado para compartir con nuestra familia o amigos (o si tenemos gente a cargo, les encantará).
Servir muy caliente.
Jose Bravo
Switch to English Presentation
¿Tienes alguna sugerencia? ¡Cuéntanosla en nuestro buzón de sugerencias!
Centro Bravo de Salud Integral - ¡Cuídate a precios Low Cost!
C/ Cerro Blanco 1, local 28026 Madrid * Tlf. 692.751.620 * info@centrobravo.es
Consulta de Psicología Sanitaria inscrita en la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid con el nº CS12816